El Consejo de Ministros a propuesta de la Ministra de Justicia ha decido otorgar al atleta burundés del Playas de Castellón Thierry Ndikumwenayo la nacionalidad española por carta de naturaleza.

Esta nacionalización llega tras varios años de solicitudes y trámites y tras 7 años de residencia en España del atleta, que se encuentra completamente integrado en la sociedad. Thierry, que esta temporada ha conseguido la mejor marca mundial del año y la séptima mejor marca de la historia en los 3000 metros con 7:25.93, lleva residiendo en España desde principios de 2016, momento en el que realizó la licencia con el club Playas de Castellón.

Su última internacionalidad con Burundi fue en 2019, cuando consiguió la novena plaza en el exigente campeonato del mundo de cross de Aarhus, y el pasado año renunció a participar con Burundi en los Juegos Olímpicos de Tokyo para poder participar con España en futuras competiciones internacionales.

Un año de récord
2022 fue el año de explosión para Thierry, que encontró en la pista el lugar que había demostrado en el campo a través. En Mónaco sorprendió al mundo con sus estratosféricos 7:25.93, que le valían para colocarse como líder mundial del año y como séptimo mejor marquista de toda la historia, inmediatamente por detrás de leyendas como Kenenisa Bekele (6º con 7:25.79) o Noureddine Morceli (5º con 7:25.11). Además, Thierry rompió la barrera de los 13 minutos en los 5.000 metros con 12:59.39, récord nacional de Burundi.

Futuro con España
Con la nacionalidad otorgada se abre ahora un episodio de trámites para conseguir que Thierry pueda representar a España en competiciones internacionales, ya que el hecho de ser español le permite ser campeón de España en competiciones domésticas  y no ocupar plaza de extranjero en las competiciones nacionales de clubes pero no es condición suficiente para ser seleccionable.

La federación mundial de atletismo (World Athletics) debe conceder al atleta el «transfer», es decir, que reúna una serie de requisitos para que pueda ser un «atleta elegible» por España. Este proceso, que puede alargarse hasta 3 años, puede reducirse notoriamente si el atleta es capaz de demostrar su residencia en el país durante un largo periodo de tiempo y que se encuentra plenamente integrado en la sociedad.

El objetivo del atleta es estar en el campeonato del mundo al aire libre que se disputará en Budapest el año que viene y «es probable que llegue si se argumenta bien», según han confirmado fuentes oficiales, que el atleta pueda llegar a competir como español en el gran evento de 2023.

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